Con mi mano calculo el mundo y me ensucio las uñas,
me como las pieles y escarbo la tierra.
Tanteo el fresco,derribo las hojas y escalo el pensamiento
para infectarme con la espina que se hunde en las venas
viaje por mis huesos y termina en la palma de mis visiones
emborrachándome otra vez esos recuerdos lastimosos.
Lo intente con las reglas comunes de todos
también con la filosofía tan barata por oferta
la cruel lógica-matemática visite alguna que otra vez
escuche a mi madre,a mi padre,a mis amigos,a mi perro
y mi mano sigue siendo la mejor opción a pesar de tanto
tanto callo,tanta tierra,tanta sangre,tanta historia rota,
caricias hipócritas y verdaderas,tintas aburridas y absurdas,
que se quejan y reclaman el paso del tiempo bufón.
Admito he jugado en las casas de los espejos
para adivinar quien era yo en verdad;
tirano y abarcador,tan único que valía miles,
ojos miles capaces de verlo todo,eminencia de la verdad.
Estúpido por conocido y reconocido por estúpido
le pegue a la figura reflectada en el espejo,
mi sombra se rió y me murmuro el recuerdo mas viejo
donde yo era extraterrestre en un sueño
viajando galácticas situaciones sin sentido.
Desde niño supe que iba a ser difícil convivir con mi incomprensión
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